«El fiscal penal Marcelo Martini archivó la causa por considerar que prescribió, pero seguiremos luchando», advirtió a Télam la referente de la Red de Sobrevivientes del Abuso Eclesiástico, Julieta Añazco, quien denunció haber sido abusada de niña por Giménez,
Actualmente el sacerdote tiene 83 años y está recluido en el Hogar de Ancianos Marín, de La Plata.
Si bien Giménez estaba procesado en tres causas lo absolvieron en dos y sólo se mantenía la iniciada por Añazco en 2013, cuando tras superar un bloqueo mental denunció que la había abusado.
De acuerdo con esa denuncia, el sacerdote aprovechaba los campamentos para meterse en las carpas donde dormían las niñas y tocarlas, lo que también hacía mientras las bañaba.
La denuncia se radicó ante la UFI 6 a cargo del fiscal Marcelo Romero, que a fines de 2015 archivó la causa alegando la inexistencia del delito pero luego la desarchivaron y pasó a la fiscalía de Martini, quien a pesar de los pedidos de la mujer nunca citó a declarar al sacerdote.
El caso se informó en 2014 al papa Francisco, en el Vaticano, y al mismo tiempo se le pidieron explicaciones al Arzobispado de La Plata sobre la protección que le brindaron al sacerdote, después de que otras personas lo denunciaron por hechos similares.
Añazco y sus abogadas lograron que el Arzobispado a cargo de monseñor Héctor Aguer asuma que el sacerdote pertenece a esa arquidiócesis y reconozca que fue condenado en sede canónica por abusos, aunque nunca detalló sobre qué casos fundaron esa condena.
Fuente: Télam
