Estamos muy pero muy felices, nos cambió la vida, es una emoción que no tiene palabras”, dijo Hannah Palacios (44), la madre de Facundo, también ella una persona trans. Hannah contó que el niño “nació sietemesino como yo” el lunes pasado con casi un kilo y medio de peso, razón por la cual “hasta hoy está en incubadora para que se le terminen de desarrollar los pulmones y pueda respirar por sí solo”.
“Bajamos a verlo dos o tres veces por día. Es una experiencia muy linda, con Franco estamos las 24 horas pensando en Facu, nos cambió la vida”. La pareja espera que hoy se produzca el alta de Franco -que sigue internado- mientras que el bebé, al ser prematuro, deberá permanecer un tiempo más internado.
“¡Es hermoso Facu! Verlo en la incubadora nos parte el alma, con el respirador y las sondas, pero tienen que madurar sus pulmoncitos”, dijo. A pesar de la alegría, Hannah y Franco no pudieron dejar de sentir los efectos del trato inadecuado que les dispensaron algunos integrantes del personal de salud del Hospital Santojanni, donde se produjo el parto, que no respetó su identidad de género. “Sigue habiendo mucha discriminación hacia nosotros, más con Franco, que lo trataban de ella todo el tiempo”. Hannah aprovechó para llamar a la reflexión a los lectores y comentaristas de este tipo de noticias en redes sociales, algunos de los cuales “dicen cosas muy hirientes”. La joven explicó que “hay mucha gente tóxica que nos juzgan sin conocernos” y los agreden por su decisión de traer un hijo al mundo al que ya aman con todas sus fuerzas, “habiendo pedófilos o madres y padres que abandonan a sus hijos” a quienes no se les reclama nada.
Fuente norte