El chamamé llora a uno de sus más reconocidos personajes luego de que se conociera que el paí Julián Zini pasó a mejor vida este domingo, alrededor de las 20. El referente chamamecero y religioso se encontraba internado en el Hospital Vidal de la capital correntina, debido a que estaba atravesando una dura enfermedad oncolológica.
A finales de julio ya había ingresado de urgencia debido a una recaída y desde el Departamento de Oncología del centro de salud habían informado que se le practicaron estudios para conocer el progreso de la enfermedad, ya que las evaluaciones clínicas practicadas previamente determinaron que la diseminación estaba avanzada.
El presidente del Instituto de Cultura de Corrientes, Gabriel Romero fue uno de los primeros en despedirlo a través de las redes sociales donde redactó: “Hasta siempre Pai Julián, gracias por todo Arandu de nuestra cultura y que descanses en paz”. El gobernador hizo lo propio, expresando sus condolencias por medio de su perfil oficial de Twitter: “Con profundo dolor, despedimos al padre Julián Zini. Con sus poemas y recitados, supo interpretar y expresar la esencia del ser correntino. Deja tras de sí sus obras, además del mejor de los recuerdos. ¡Hasta siempre, Paí!”
Cura, poeta y músico, Julián Zini es un referente de la cultura del país que reivindica las raíces guaraníticas tan características del nordeste argentino. También la defensa de los derechos humanos y el respeto por el medio ambiente han sido preocupaciones que ha volcado en sus letras y en su vida misionera.
SU HISTORIA
Sacerdote, poeta, autor y compositor, Julián Gerónimo Zini, nació en el paraje «El Centinela», Departamento Ituzaingó (Corrientes) el 29 de septiembre de 1939.
Vivió su infancia en la tierra de su familia, en el «Paraje Cambaí», (Monte Caseros – Corrientes), a orillas del Rio Miriñay, antiguo puesto de las Reducciones Jesuíticas.
Realizó estudios de Filosofía y Teología en el Seminario Menor de la ciudad de Corrientes y los completó en el Seminario Mayor de La Plata (BA). En 1963 se ordenó como Sacerdote.
Radicado en la ciudad de Mercedes en la década del 70, se relacionó con jóvenes artistas de la región como José Ramón Frette, Carlitos Miño, Joaquín Sheridan y Julio Cáceres, con los que formó su primer conjunto «Los Hijos del Pay Ubre». En esta etapa ven la luz sus primeras composiciones.