Ocurrió en el barrio Itatí, de la ciudad de Corrientes, en las inmediaciones de Roca y Río Paraná. Allí, el sábado, en horas de la siesta, un grupo de alrededor de 300 hombres se concentraron para jugar un campeonato de fútbol.
Inmediatamente vecinos que cumplían religiosamente el aislamiento social y obligatorio dieron aviso al sistema de emergencias 911, llegando al lugar varios móviles policiales.
Los futbolistas atacaron a con piedras y botellas a la policía, resultando herido un efectivo del patrullero 215.
Los inadaptados se dieron a la fuga por distintos sectores y minutos más tarde se concentraron nuevamente para jugar un partido.
Los vecinos comentaron a este medio que todos los fines de semana es la misma historia y que en la zona de la arenera se junta mucha gente con criaturas, por lo que piden mayor presencia policial.
Otro caso similar se dio al caer la tarde del sábado en una cancha ubicada en inmediaciones a Gutnizki y Garay donde también un grupo numeroso estaba violando la cuarentena. Al llegar la policía los agredieron con piedras y con disparos desde una tumbera.
Tras varios minutos de enfrentamiento la policía pudo dispersar a los sujetos y un efectivo resultó gravemente herido en el ojo. Minutos más tarde, los revoltosos cascotearon el destacamento del GIR por lo que nuevamente acudieron varios patrulleros a la zona para finalmente controlar la situación.