Frente a estos índices, comenzó a implementarse un proyecto para mejorar la calidad de vida del personal de la fuerza pública. Las actividades son organizadas por la Policía de Corrientes en colaboración con el Instituto de Cardiología y tiene el objetivo de modificar la cuestión alimentaria y física de los policías.
“Cuando se realizaron los exámenes en el personal para los ascensos se detectaron factores de riesgo, como hipertensión, colesterol, diabetes y sobrepeso. De cada 10 policías, tres o cuatro tienen el peso normal. Esto es el reflejo de la sociedad, pero en referencia a ellos es distinto, por eso la preocupación del área de Recursos Humanos de la Policía es frenar y en lo posible volver para atrás esos índices”, comentó el doctor Alejandro Amarilla, director del Departamento de Prevención de Enfermedades Cardiovasculares del Instituto de Cardiología de Corrientes, que colaboró con el programa “Camino hacia una vida saludable”, que comenzó a funcionar con guías de apoyo nutricional para el sector.
Fuente 21tv