“El robo de ganado se llevó la vida de un comisario. Luego de eso hubo un antes y un después, pero ahora la situación volvió a ser grave y cada vez hay más abigeato”.
La denuncia de un ganadero que al que un grupo de cuatreros le despojaron de cinco animales durante el fin de semana avivó los reclamos de los productores de la localidad de Alvear y localidades vecinas por seguridad, a más de un año de una promesa del Estado Nacional de brindar una solución a la problemática.
Debido a la falta de respuestas de las autoridades gubernamentales y de fuerzas de seguridad, las entidades que nuclean a los ruralistas enviarán en el transcurso de hoy un fuerte reclamo de al Gobierno.
“No hay profesionalismo de la Policía. No hay compromiso, y se carece de respuestas ante estos hechos que nos producen gravísimas pérdidas económicas y pueden derivar en otros hechos más graves”, denunció José, un empresario que el sábado descubrió cueros y restos de cinco animales que fueron faenados por ladrones en su campo.
Las pérdidas son cuantiosas. Un animal está valuado en unos $30.000, pero también atacan a vaquillas preñadas y reproductores, lo que significa un daño más grave.
A estas pérdidas se suman las generadas por la rotura de los piquetes, debido a que los delincuentes, con el fin de entrar a los campos, rompen los alambrados.
Pero el daño también genera un riesgo a terceros, toda vez que, debido a que la mayor parte de los campos están al costado de rutas y caminos muy transitados y que, tras la destrucción de los cercos perimetrales, la hacienda se dirige hacia las vías de tránsito.
“Cuando los animales van a la ruta existe riesgo de accidentes que pueden costar la vida a una persona”, remarcó el ganadero damnificado por la irrupción de los cuatreros.
Recuerdan que en 2018, tras un hecho luctuoso en el que murió un efectivo policial, se había reforzado la seguridad en la zona rural y se nombraron autoridades en la Policía Rural de Islas y Ambiental Rural (Priar) de Alvear. “Pero luego cambiaron las autoridades y comenzaron otra vez los robos. Ahora la situación es grave nuevamente”.
Una falsa promesa y la puerta giratoria
Los ruralistas de la zona de la costa del Uruguay reclaman que el Estado ponga en marcha mecanismos para frenar el robo de ganado tras un año de una promesa del Gobierno de involucrar en la problemática a las fuerzas de seguridad nacional.
El anuncio de involucrar en la problemática a las fuerzas federales fue en febrero de 2018 cuando los productores ganaderos de la costa del río Uruguay se reunieron con el coordinador de Seguridad Rural del Ministerio de Seguridad de la Nación, Carlos Rossi, a quien le reclamaron medidas urgentes para afrontar el embate de las organizaciones delictivas que sustraen ganado en esa zona de la provincia. En esa reunión el representante del Estado nacional prometió que se implementaría un plan de seguridad conjunto entre las fuerzas nacionales y provinciales.
Pero esto no se cumplió, aunque luego de esto se registró una baja significativa en los casos. Esto fue porque se reforzó la tarea de la Policía de Corrientes luego de que el jefe de una banda de cuatreros y piratas del asfalto mataron a tiros al comisario Miguel Duarte, de Alvear, en una redada donde también murió el delincuente.
Es por ello que, ante los nuevos casos de robo de ganado, los ganaderos aseguran que “la muerte de un comisario no sirvió para nada, porque no hay seguridad para frenar a las bandas que siguen atacando”.
Reclaman también acciones por parte de las autoridades judiciales y recordaron que en octubre de 2018, la Sociedad Rural de La Cruz, denunció ‘una puerta giratoria’ en los casos de abigeato ocurridos en la zona. En la oportunidad, la titular de las Asociaciones de Sociedades Rurales, Verónica Storti, manifestó que “es imperioso que la Justicia se adecue al tiempo, ya que no es posible que la Policía no haya concluido sus tareas y el cuatrero ya esté en libertad, esto molesta mucho, y desanima al productor que lucha día a día para mejorar su empresa”.
Además agregó que los cuatreros, “ahora también asaltan los establecimientos, toman rehenes, y la Justicia no dice presente”.
La situación continúa sin cambios, pese a las promesas de los funcionarios.
Fuente diario norte