Dos delincuentes fueron reducidos a golpes a manos de “vecinos justicieros”, en los barrios Jardín y Punta Taitalo de la ciudad de Corrientes. Uno de ellos intentó arrebatar el teléfono de una adolescente y el restante pretendió robar una balanza de un comercio cercano a su casa.
El primero de los casos sucedió el viernes al anochecer, alrededor de las 19:15, en la esquina de las calles Las Violetas y Los Laureles, donde una jovencita de 13 años, y su amiga de 15, fueron víctimas de dos “motochorros”.
Ambas menores estaban sentadas delante de la casa de una de ellas. A pocos metros, estacionó una motocicleta con dos sujetos. Uno de ellos descendió, corrió hacia las adolescentes e intentó sustraer el aparato de comunicación.
Los gritos desesperados alarmaron a familiares de la chica de 13 años. También a vecinos que salieron a la calle corriendo para brindar auxilio.
En el momento en el que el delincuente forcejeaba con la menor, su cómplice habría sentido miedo de ser detenido y huyó en la moto.
El malviviente que estaba a pie desistió del robo e inició la fuga a la carrera. Sin embargo, no pudo ir demasiado lejos. Entre varias personas comenzaron a perseguirlo hasta darle alcance.
“Lo agarraron y le dieron una paliza. No se resistió. Pedía que no le peguen”, indicó una vecina.
Una vez en manos de la Policía, este delincuente fue identificado como un joven de 17 años llamado Ariel, quien al parecer ya cuenta con un antecedente de demora relacionada también a un delito callejero.
Por una razón de jurisdicción, intervinieron autoridades de la comisaría seccional Novena.
A no mucha distancia, en el barrio Punta Taitalo, el viernes a las 23 se produjo un incidente callejero derivado de un intento de robo.
Aunque por este hecho no hubo denuncia, diario época, gracias al aporte de vecinos, supo que un joven de 22 años, de amplios antecedentes criminales, volvió a ser descubierto tratando de robar cerca de su vivienda.
En concreto, el ladrón, junto a un amigo, pretendió sustraer la balanza de una despensa. Pero los dueños notaron esta situación y se “trenzaron” a golpes con el sospechoso.
Los desmanes alertaron a otros habitantes de la zona, quienes alertaron a la Policía, causando la llegada de una patrulla.
Ayer, desde la institución de seguridad indicaron, al respecto, que “no hubo denuncia” y tampoco actuación “de oficio”, por lo que el sospechoso nada más fue identificado. Cotejaron sus antecedentes para saber si tenía alguna otra causa pendiente y recuperó la libertad.
El jueves, en el barrio Nueva Valencia, otro arrebatador fue reducido por “justicieros”, quienes socorrieron a una mujer de 60 años.
La sexagenaria fue sorprendida por dos ladrones, quienes estuvieron a punto de robarle una cartera, en la esquina de Las Violetas y José Negro. A pesar de un intento de fuga, los civiles redujeron a Carlos G., de 19 años.
Fuente: Diario Época