Todo comenzó por la presencia de carteles en las unidades de Ataco Norte y Ersa informando que el servicio se brindaría solamente de 6 a 22, generando enorme desconcierto entre los usuarios.
Por la tarde el panorama fue aclarándose, aunque los empresarios indicaron que el malestar existe. En este sentido, según consignó Radio Sudamericana, Javier Harfuch de Ersa explicó que “el servicio se va a prestar de manera normal” en ambas empresas. “Era una medida que se estaba analizando pero no se concretó y no se va a concretar”, aclaró.
“Esto obedece a una serie de medidas que se estaban estudiando para reducir los costos de servicio porque no se cumplió con la asignación de subsidios nacionales ni la actualización de la tarifa. El servicio Chaco – Corrientes después de la precariedad de más de 20 años ha sido licitado y está prestándose en condiciones de excelencia y la normalización de estos parámetros de ingresos para las empresas no se ha producido desde el ámbito nacional. Luego de conversaciones con Nación se consiguió un compromiso de regularizar la situación durante el mes de agosto”, añadió.
Fuente diario norte