Luego de un enfrentamiento, el agente fue a identificar a los traficantes con otro oficial. Los vecinos de la zona lo llevaron al hospital, pero falleció.
Un policía fue asesinado tras un enfrentamiento con una banda narco en la localidad de Rafael Castillo, en La Matanza. El agente fue identificado como Benjamín Nazareno Zucarelli y prestaba servicios en la Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas (UTOI).
El hecho ocurrió pocos minutos después de las 19 de este martes. En el momento del ataque, el hombre se encontraba en las calles García Merou y De La Fuente, cuando junto a otro efectivo fueron a identificar a un grupo de hombres.
Los dos agentes fueron asignados para patrullar un área cercana a un cementerio abandonado que se convirtió en un punto de concentración de varios traficantes que se dedicaban a comercializar drogas en esa zona.
Cuando llegaron, ambos comenzaron a recorrer el lugar en un patrullero y observaron a un grupo de sospechosos. Entonces, los uniformados se acercaron para identificarlos y los ladrones comenzaron a disparar al móvil policial.
Según trascendió, los policías no habrían tenido tiempo de sacar sus armas reglamentarias. Uno de los agentes fue llevado por los ladrones adentro del cementerio abandonado, donde recibió un balazo en la cabeza, mientras que el otro oficial, que todavía no pudo ser identificado, resultó herido.
Al escuchar los disparos, los vecinos de la zona alertaron al 911. A partir de allí, un grupo de unos 22 efectivos llegaron al lugar para buscar al hombre que estaba en el cementerio, que quedó cautivo de los agresores.
Luego de buscarlo por 10 minutos, lo encontraron y lo llevaron en un móvil hasta el Hospital Favaloro, en González Catán. Allí, los médicos le realizaron maniobras de reanimación y lograron estabilizarlo. Sin embargo, minutos después falleció producto del impacto de bala en la cabeza.
Los atacantes fueron identificados
Según fuentes de la investigación, los agresores habrían sido encontrados. La identificación surgió porque uno de los sospechosos posteó en redes sociales una foto con un fusil rodeado por algunos de sus cómplices, algo que fue interpretado como un mensaje dirigido a otras bandas rivales que pelean por quedarse con la zona del cementerio.
