Además del intendente, estuvieron presentes los socios que pusieron en marcha el emprendimiento, Lautaro Quiroz, Leandro Bellini y Franco Uriarte, y Rubén Bisceglia, responsable de la Librería de la Paz.
Martínez manifestó: “Esta es una propuesta gastronómica de cafetería, confitería y bar que tiene un servicio de desayuno, almuerzo, merienda y cena de platos autóctonos hechos con productos locales y, a su vez, mixturado con oferta literaria de la región”.
“Esta es una apuesta para que Resistencia siga creciendo como polo gastronómico y cultural y que permite potenciar la identidad de la ciudad y la generación de puestos de trabajo nuevos”, comentó y agregó que “siempre es necesario una sinergia entre los sectores públicos y privados para producir nuevas propuestas laborales y económicas”.
Quiroz sostuvo que “este bar es un nuevo concepto para la ciudad que tendrá la característica de ser literario y cultural con autores autóctonos, gastronomía y tragos regionales”.
Comentó que la idea surgió hace unos meses cuando notaron que Resistencia precisaba un espacio gastronómico que “tenga las características y pueda albergar a las personas que buscan comer mejor y disfrutar de cultura”.
Bisceglia expresó que “Resistencia adquiere una fusión interesante entre cultura literaria y gastronomía”, y añadió que el bar posee un importante menú de comida local junto con una librería chacú-guaranítica que busca hacer conocer a los autores autóctonos y escritores para promocionarlos.