Asimismo, acusaron a los dueños de las líneas de larga distancia por actuar «sin el menor sentido de sensibilidad hacia los trabajadores, que vienen poniéndole el cuerpo al sector de larga distancia para mantener la actividad en el sistema».
«No vamos a permitir que nos precaricen las condiciones laborales de los compañeros representados, como prenda de cambio ante un justo pedido de aumento salarial», remarcaron. Es que, según denuncian desde UTA, la gran mayoría de las empresas del sector mantiene impagos los salarios o viene llevando a cabo un mecanismo de pagos parciales. «Adeudan salarios, sumas no remuneratorias acordadas, Decreto 14/2020, viáticos, etcétera», aseguraron desde el gremio.
Actualmente, el Estado Nacional aporta $600 millones mensuales al sector a través de la resolución 283/2021 del Ministerio de Transporte, que se suman a los $260 millones mensuales que reparte el Ministerio de Trabajo en concepto del programa Repro II. Sin embargo, los trabajadores continúan cobrando en cuotas. «Todo ello demuestra que estamos ante la desidia de un sector empresario sin escrúpulos, y sin límites», arremetieron.
«Parece que pretenden mantener sus márgenes de utilidad en base a la declaración de pandemia, o a costa de la precarización de las condiciones de trabajo, pretendiendo que manejemos más horas, menos conductores, al margen de la ley y burlando todos los derechos de los trabajadores. Nos pretenden hacer trabajar en exceso de la jornada convencional, violentando las conquistas de décadas por el movimiento obrero organizado», señalaron desde UTA.
Por lo pronto, el gremio que conduce Fernández llevará a cabo la medida de fuerza a nivel nacional en el sector de larga distancia. Será por el plazo de 72 horas y comenzará este viernes a mediodía.
Fuente ambito