Ramón Ruiz Díaz vive en la Isla de Oro, en Formosa, y es el protector de los carpinchos que habitan el lugar. No abandona la zona por temor a los cazadores. También alimenta a estos animales, a los que les gusta “desayunar y merendar” cocido con leche y pan.
Su historia se conoció en la provincia gracias a una campaña organizada por un grupo de jóvenes, uno de los cuales se había topado con el anciano de 71 años. Este joven decidió compartir la historia en su grupo de WhatsApp de la carrera y rápidamente muchas manos solidarias pusieron manos a la obra.
Ramón contó al grupo que varias veces quisieron sacarlo, pero él se siente un proteccionista de los carpinchos. “Los animales están domesticados y él les da todas las comidas; realmente los cuida, a pesar de sus necesidades”.
Según el diario La Mañana, la historia del anciano no fue fácil por las muchas necesidades que padecen, él y su familia. Pero esto no es un impedimento para que todos los días se asegure del bienestar de los animales.
Además, contó que esta tarea la realiza de manera ininterrumpida desde hace más de once años. “Los cuido mucho por los cazadores, no los abandono ni un segundo”, aseveró. Y respecto de su propia situación, fue claro en remarcar que no necesita ni ropa ni calzado ni nada para él: todo es para los carpinchos. “Les doy cocido con leche y pan, a la mañana y también a la noche; sólo necesito que me ayuden a poder seguir haciéndolo”, expresó.
Ramón contó que antes, mantenía a su familia con la caza de carpinchos hasta que un día tuvo un sueño que lo alentó a que no lo hiciera más y el cambio fue rotundo. “Estoy en una carpa, ya me la quemaron una vez y me volví a armar mi espacio porque no quiero irme de acá. Hago este trabajito con mucho sacrificio porque amo a estos animales”, cerró.
Fuente: La Mañana
