* Carta de apoyo, debajo los firmantes.
Quienes suscribimos estas palabras, nos dirigimos a los muchos hombres y mujeres de bien, que con sorpresa, seguida de indignación, supieron de la noticia tristemente rotulada «Bobinas Blancas» que señalaba a dos conciudadanos nuestros como implicados en ella.
Queremos decirles, a las personas de bien, que no tienen la suerte y el honor de conocer y tratar a Javier Busciglio, a su hijo Luciano Busciglio y a toda su familia y que ahora sólo los conocen por la exposición pública que tiene el caso en la prensa y en las redes. A todos aquellos que recibieron una gran cantidad de información errónea propagada irresponsablemente y que quizás ya han realizado su juicio y dictado su sentencia, basados en esos datos. Queremos decirles a ustedes que nosotros sí los conocemos, y no de hoy, ni de hace algunos días, ni por los medios, los conocemos de toda una vida, los conocemos por su integridad moral, los conocemos por su culto al trabajo duro y honrado, los conocemos por su vida familiar y social, los conocemos por su fe en Dios, por su solidaridad, amistad, austeridad, patriotismo.
Una serie de circunstancias, todavía en plena investigación, que se aclararán debida y oportunamente en ese proceso legal y en el que asentamos toda nuestra confianza, no debe adquirir virtualidad para derrumbar en un solo instante toda una vida honorable y sin tachas que estos hombres supieron fraguar a través del paso de los años y de los que infinidad de personas fuimos testigos –amigos, parientes, vecinos, clientes, compañeros, dependientes, etc .
La divulgación masiva de información inexacta y el lógico repudio que las acciones criminales de esta naturaleza genera en el ciudadano, a veces se conjugan de una manera tal que hacen perder de vista lo inverosímil que resulta, que personas que se han desempeñado siempre correctamente en todos los ámbitos en que son amplia y públicamente conocidos, puedan ser los mismos a quienes se atribuyen despreciables conductas. El sentido común evidencia el absurdo de tales juicios y obliga a la prudente espera de los resultados objetivos de la investigación judicial.
Alberto Javier Busciglio es un hombre de bien, cuya situación legal está siendo y será perfectamente aclarada en el proceso y de ninguna manera merece que se lo juzgue mediáticamente por hechos despreciables de los que jamás fue parte.
Esta afirmación categórica, ha dado lugar a la solidaridad de infinidad de personas que han mostrado su afecto, confianza y apoyo y que suscriben con la intención de respaldarlos con esta carta ,de desagraviar y de exaltar la honorabilidad de estas personas y su familia.
Fuente: diariotag