El «beneficio» no es más que transformar al medio aguinaldo, un derecho que tienen las y los trabajadores desde hace más de medio siglo, en un crédito. De esta forma también, la Caja Municipal pasa a tener el funcionamiento de una entidad financiera privada cuyo único objetivo es el lucro.
Claro está que en las circunstancias descriptas, el lucro se realiza sobre las necesidades de las y los empleados municipales en tiempos de crisis por la pandemia de coronavirus.
El salario mínimo en el Municipio de Corrientes es de 15.500 pesos, por lo que el medio aguinaldo es de $7.750. Por adelanto de aguinaldo, la Comuna otorga hasta el 70% del monto a cobrar.
Es así que un trabajador o trabajadora municipal que cobra la mínima y solicite el «aguinaldo dorado», sufrirá un descuento por parte de la Caja Municipal de alrededor de 2.000 pesos en un año por la tasa del 36% impuesta por Tassano.
Para un trabajador o trabajadora cuyo salario es de 24.000 pesos y pide un adelanto de aguinaldo, el descuento anual que sufrirá será de más de 3.000 pesos.
Son 6.000 las y los empleados municipales que están bancarizados desde abril de 2018, y pueden acceder al aguinaldo dorado.
Vale aclarar que desde el Gobierno nacional impulsaron créditos bancarios con una tasa de interés anual del 24% para que las Pequeñas y Medianas Empresas puedan pagar los salarios. Las Pymes solicitaron tasa 0, debido al parate total que significó el Aislamiento Obligatorio.
Tassano redobló la apuesta y aplicó una tasa del 36% a sus empleados, que son de los más precarizados de la provincia.