Salta se encuentra en una situación sumamente delicada en distintas áreas y los legisladores provinciales parecen no darse por aludidos. En medio de la Emergencia Sociosanitaria decretada por el gobernador Gustavo Sáenz por la muerte de niños wichis por desnutrición, la Legislatura permanece inalterable y sin actividad oficial a la vista.
La coyuntura obliga a la dirigencia política a estar a la altura de las circunstancias. Oficialistas y opositores. Todos tienen responsabilidad de bregar por el bienestar de la población. O de solucionar los problemas más acuciantes. Sin embargo, los legisladores continúan de vacaciones hasta el 1 de abril cuando se inauguren las sesiones ordinarias.
«Estamos todo un cuatrimestre cobrando un sueldo sin tener sesiones», sentenció el diputado radical Héctor Chibán (ver link). Es lo que piensa buena parte de la sociedad sobre el rol que tienen los legisladores y la cantidad de días que trabajan. O que no trabajan, en todo caso. No se condice con los suculenteos sueldos que cobran para representar a los ciudadanos. Más aún cuando comprovincianos la pasan tan mal y en algunos casos mueren por la desidia y el abandono de años por parte del Estado.
Parate eterno
La última sesión en Diputados fue el 3 de diciembre cuando se aprobó la Ley de Ministerios. Días después fue el turno del Senado. Desde entonces hasta la fecha no hubo actividad parlamentaria en Salta.
Fuente que pasa Salta