La polémica estalló cuando, a comienzos de semana, en el marco de la visita a Corrientes del subsecretario de Asuntos Penitenciarios, Juan Bautista Mahiques, tanto este como el mandatario correntino confirmaron las intenciones del Gobierno nacional de instalar dos cárceles federales en la provincia: una en la capital y otra en Ituzaingó.
Esto provocó el rechazo inmediato de los vecinos de la ciudad balnearia, quienes se movilizaron en repudio de esa posibilidad. El martes y el miércoles, más de 70 autoconvocados se reunieron para organizar una junta de firmas y redactar un acta que igualmente será entregada a autoridades municipales.
Ante la presión social, el Gobernador reformuló sus dichos y señaló que “lo que estaba observando la Nación en Ituzaingó es la factibilidad de instalar (una penitenciaría), si es que el predio estuviera desocupado. Pero no es así: el mismo está siendo utilizado por familias y un par de industrias”, aclaró. Esto no convenció a los vecinos, que aseguran seguir “firmes” en su movilización.