De acuerdo a fuentes consultadas por PRIMERA EDICIÓN, el sábado por la tarde, en el cruce de las avenidas Eva Perón y Bustamante, irrumpieron varias personas, todos familiares, portando garrotes, cadenas, machetes y hachas.
Fueron de manera directa a atacar a otro grupo de parientes. La agresión fue calificada como “salvaje” y, además de dejar lesionados de diversa gravedad, terminaron destrozados los parabrisas de varios automóviles durante la “retirada”.
Las víctimas solicitaron la intervención policial y se dispuso un operativo con la participación de efectivos de las comisarías Decimotercera, Séptima y Decimosegunda y patrullas del Comando Radioeléctrico Oeste.
Con la orden del juez de Instrucción de turno, Marcelo Cardozo, se allanaron inmuebles y se produjo el choque entre los sospechosos con los uniformados.
La ferocidad que demostraron los violentos sujetos dejó como saldo un oficial y un cabo con heridas de corte y golpes, por lo que debieron ser llevados al hospital Ramón Madariaga.
El magistrado solicitó que se refuerce el operativo y se sumaron miembros del Grupo de Infantería. Con este apoyo se logró que fueran detenidas tres personas, entre ellas una adolescente de 17 años.
El cuarto de los sospechosos aprehendidos tiene 38 años y sería el presunto cabecilla de las andanzas que atemorizan al vecindario. Fue descubierto oculto en la segunda requisa que se realizó a su propiedad.
Estaba callado, aguantando la respiración dentro de un mueble y debajo de objetos y ropas en desuso.
Entre los elementos secuestrados, presuntamente utilizados para el ataque, fueron secuestrados un destornillador, un martillo, una azada, un hacha, una cadena con un candado, barretas de hierro, garrotes de madera y las dos ollas en la que hervía el agua y que amenazaron con arrojar a los policías si insistían en allanar su casa.
Fuente Primera Edicion